El título de esta entrega se me ocurrió buscando temas para retomar esta columna.
Contra todos mis pronósticos en estos tiempos de pandemia me he llenado de trabajo, lo que me ha dificultado sentarme a escribir.
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En la horas libres que tengo trabajo en un proyecto que vengo desarrollando desde el año pasado y consiste en recopilar las diversas manifestaciones musicales del caribe de Nicaragua.
Mientras leía sobre ritmos caribeños se me vino a la mente pensar en cómo, desde la perspectiva de músico, se puede aportar cierto conocimiento empírico y académico. ¿Cómo desarrollar el gusto por diferentes tipos de musica?
Si sos músico creo que sabrás todo lo que expongo, esta entrada está dirigida más al público en general.
Siempre me ha dado muchísima curiosidad lo que las distintas personas escuchan.
Casi siempre, y en eso no exagero, cuando hago la pregunta clásica “¿qué tipo de música te gusta?” espero siempre la respuesta clásica: “de todo…”
Creo que la mayoría contesta esto porque realmente no sabe qué decir. Obviamente no escucha de todo, por que para escuchar de todo se tiene que aprender a disfrutar de todo.
No vas a escuchar algo que no entendés o no disfrutás
Usualmente cuando dicen «de todo» se piensa que todo lo que suena en la radio, o en el TOP 50 de Spotify, pero se deja a un lado músicas de otras épocas, de otros siglos, de otras décadas, los precursores de los diferentes géneros modernos, la música antigua, el clasicismo, el jazz, el blues, la música tradicional brasileña, la música balcánica, etc.
Cuando le decís eso a la persona que afirma escuchar de todo, le hacés ver que en realidad no escucha mucha variedad, se queda hasta donde su curiosidad la ha llevado o hasta donde la sociedad a la que está expuesto le propone.
Esto responde a diferentes razones, la primera es que en Nicaragua la gente no tiene educación musical formal.
Nicaragua, hasta hace unos años, era el único país de Centroamérica, que no tenía música como asignatura en la enseñanza pública en las escuelas primarias (y eso que dizque hubo una revolución hace 41 años).
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Además, los programas actuales son muy rudimentarios e insuficientes para realmente enseñarle a niña/os y adolescentes no sólo cómo funciona la música, sino mostrarle y enseñarle a apreciar a sus principales exponentes.
Otra de las razones es que los conciertos internacionales se concentran en nichos comerciales de moda, es decir, cuando se arma un concierto tiene que ser el del último grupo o “cantante” de reggaeton o bachata famoso para poder asegurar que la inversión que se va a hacer sea exitosa.
Veíamos a reventar (antes de la crisis del 2018 y 2020) conciertos de Prince Royce o Ricardo Arjona, pero a festivales de música clásica, jazz o rock no llega casi nadie.
¿Por qué? Pues porque la mayoría de personas no conoce de esta música, y tal vez porque nadie le ha sugerido artistas de estos géneros o como en los medios masivos nadie toca el tema pues ni cuenta se dan de que existen conciertos de este tipo (eso es también culpa de la pobre publicidad que hacen los organizadores).
Habrán muchas otras razones más, pero el gusto por música más sofisticada y con mayor cantidad de información se adquiere, construye y desarrolla día a día.
Tampoco dudo en lo más mínimo que en Nicaragua existe un público culto y musical que puede irse expandiendo a medida que músicos, educadores y medios de comunicación fomentemos escuchar la buena música, diferente a solamente el éxito efímero del momento.
Acá unos tips que pueden ayudarte a expandir tu cultura musical:
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Si te gustan los géneros como el reggaeton o música urbana podés investigar quiénes fueron los pioneros de estos géneros. Por ejemplo el reggaeton nació en Panamá en los 80’s y 90s.
Fue principalmente hecha por los afro-panameños que recogieron influencias raggamuffin y dancehall jamaicano, combinándola con el hip hop y el rap.
Algunos exponentes fueron El General, Renato, Chicho Man, Michael Ellis, y Nando Boom. Más tarde hizo su camino a Puerto Rico, donde obtuvo gran popularidad.
De ahí podés partir a otros géneros primarios como el reggae y la música caribeña en general que está fuertemente influenciada por la combinación cultural española/inglesa/africana que es un mundo entero por sí sola.
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Siendo empírico en conocimiento musical. Hay miles y miles de videos en Youtube donde muchísimos músicos exponen cómo se construye el lenguaje musical de forma sencilla y accesible a cualquier persona.
Entender y aprender a analizar cómo funciona la melodía en relación a la armonía, el ritmo y sus infinitas formas, la forma del sonido o el timbre, la producción, los diversos contextos históricos, sociales y culturales de cualquier pieza musical, nos va a ayudar a ampliar nuestro abanico de opciones.
Es como ir a un buffet de comida del mundo y aprender a degustar de cada uno de los diferentes sabores.
Aprender un instrumento musical como la guitarra o el piano al menos de una forma muy básica (que no tomaría más de 6-8 meses) te ayudará a apreciar mejor la música y no quedarte siempre en la superficie.
Todo el mundo aprecia la melodía de una canción acompañada por sus acordes, aunque no la conozca.
Esto te dará una mayor experiencia musical y te enseñará de forma práctica cómo se mueven las notas y su relación con el ritmo.
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La música clásica es un gusto adquirido en las salas de concierto. No es lo mismo escuchar a Brahms en una playlist de Spotify, que ir al teatro a ver a un orquesta ensamblar el Concierto para piano y orquesta n.o 1 en re menor.
Lo mismo pasa con el jazz e incluso el rock. Ir a conciertos en vivo de géneros en específico te dará una visión muchísimo más amplia y vívida de cómo se construyen estos géneros y el por qué hay tantas personas apasionadas por ellos.
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La vieja confiable de escuchar las canciones más populares de un artista nuevo para introducirte a este funciona muy bien.
Si sólo escuchas rock podés probar cuáles son los principales exponentes de la salsa o de los boleros, si sólo escuchás pop podés indagar en su género hermano el rock e irte por décadas; en los 60s, 70s y 80s hay años de buena música.
Si sólo escuchaste música de “tu época”, podés irte a la época de tus padres y abuelos (o incluso bisabuelos) y verás que la música es un mundo enorme y fascinante del que no tendremos suficientes años para aprender a disfrutar.
Donaldo Sevilla, conocido por su columna como El Melómano, es fundador del Centro de Estudios Musicales, para más información de los cursos que ofrecen seguilos en sus redes sociales.
FURIACA