La nueva exposición individual Horizontes de la artista Lucy Tomasino nos invita a cuestionarnos sobre el paisaje urbano y cómo los muros van inundando de concreto ese lugar que conocemos como hogar.
La obra artística más reciente de Tomasino se inaugura el miércoles 14 de Agosto y estará abierta al público hasta el 20 de septiembre en el teatro Luis Poma en San Salvador.
FURIACA: ¿Por qué es importante para ti esta exhibición?
Lucy Tomasino: Para mí, esta exhibición representa una oportunidad de no solo para presentar mi trabajo, sino para revelar los procesos que existen en mi práctica artística. Es un espacio donde puedo compartir cómo evolucionan las ideas, cómo las experiencias vívidas se transforman en obras, y cómo cada pieza es un reflejo de mi exploración constante sobre temas distintos.
FURIACA: ¿Cuánto tiempo te llevó producir esta investigación artística?
Lucy Tomasino: La idea comenzó a gestarse hace unos cinco años, cuando empecé a trabajar los primeros bocetos. Sin embargo, la producción intensa y enfocada realmente comenzó hace un año. En este tiempo, he dedicado mis esfuerzos a profundizar en la investigación y dar forma tangible a las ideas que habían estado en mi cabeza todo este tiempo.
FURIACA: ¿Cómo fue el proceso con tu familia y otras referencias para tu obra?
Lucy Tomasino: Me gusta pensar que estas casas, y en particular sus muros, son parte de mi día a día para llegar a equis lugar. Aunque personalmente no he vivido en este estilo de casas, reflexiono sobre cómo, a lo largo de tres generaciones, las tres han visto estos muros elevarse y transformarse. Cada muro es un testimonio de la evolución de una historia de barreras, físicas o simbólicas, que hemos enfrentado y superado.
Sobre la artista
Reside y trabaja en San Salvador, donde obtuvo su licenciatura en Ciencias de la Comunicación y Multimedia por la Universidad Don Bosco en 2017. Su práctica artística abarca una variedad de medios, incluyendo la fotografía experimental, intervenciones en espacios públicos, performance e instalación. Ha realizado intervenciones en la ciudad de San Salvador con instalaciones de arte en formatos medianos y grandes.
Desde 2013, ha participado en diversas exposiciones tanto colectivas como individuales, destacándose su participación en Proyecto Se Alquila en Ecuador (Festival Multidisciplinario de Arte Contemporáneo, 2015), ADAPTAJES Cura Collected en Knockdown Center, Nueva York (2018), “Entretejidos” de Y.ES Contemporary en PS122 Gallery, Nueva York (2022), y SWAB Barcelona (2022), entre otros. Su obra forma parte de la colección semi-permanente del Museo de arte de El Salvador, en la exhibición «Trópico Telúrico». Recientemente, ha sido galardonada con el premio semilla Prince Claus 2024.
HORIZONTES
(Statement de la artista)
Es una colección de imágenes que encapsula la evolución de un país narrada a través de los muros que han marcado el paisaje urbano.
Esta serie de fotografías documenta tres momentos fundamentales en la historia reciente de El Salvador, cada uno representado por un tipo de muro diferente.
- El Muro de Piedra: Este primer muro, construido con piedra, simboliza los cimientos sobre los que se levantaron estas casas.
- El Muro de Ladrillo: Con el inicio de la guerra civil en El Salvador, surge la necesidad de protección adicional. Así nacen los muros de ladrillo, también conocidos como muros de retención. Estos muros que se levantaron en respuesta al miedo y la incertidumbre, son testigos de una época de conflicto y tensión.
- El Alambre de Púas y Razor:
A finales de los años 80 y principios de los 90, la sociedad decide añadir una capa extra de protección: el alambre de púas o razor. Es el eco de una época en la que la seguridad se convierte en una prioridad.
En las imágenes que he fotografiado, quiero basarme en estos tres puntos de la historia reciente. Para mí, hay una conexión profunda entre estos elementos y las generaciones de mi familia.
Mis abuelos vieron cómo se construían estas casas, mis padres presenciaron la elevación de los muros de ladrillo, en respuesta a los tiempos de la guerra civil.
Y yo, en mi infancia, observé cómo el alambre de púas se instalaba alrededor de nuestro hogar, una visión que marcó mi percepción de la seguridad.
Belleza en medio de adversidad
Para esta exhibición, planteó una pregunta fundamental: ¿Cuál será la siguiente barrera en el futuro?
He decidido trabajar estas imágenes utilizando impresiones con pigmentos de flores. Esta elección no es casual; detrás de estos muros de piedra, ladrillo y alambre, se esconden jardines.
Las flores, con su fragilidad y belleza, representan para mi la resiliencia que persiste incluso en los tiempos más oscuros. Los pigmentos florales, extraídos de la naturaleza, me recuerdan que, aunque construimos barreras para protegernos, siempre hay vidas detrás de una fortaleza. Un recordatorio de que la belleza puede florecer incluso en medio de la adversidad.
HAY JARDINES
(Texto de sala por Elena Salamanca)
HORIZONTES es la nueva exposición de Lucy Tomasino. Horizontes es una operación artística transdisciplinaria, pues cruza la historia, la antropología, la experimentación botánica y, por supuesto, la fotografía. El ojo de la fotógrafa y la mano de la artista nos alcanzan lo que la historia oficial ha colocado lejos. Una historia otra cercada por muros.
El muro es un hallazgo. En Horizontes, Lucy fotografía los muros de casas de diversas zonas de San Salvador. Nos parece que han estado siempre ahí. Muros construidos unos sobre otros, como estratos de tiempo.
Reinhart Koselleck desarrolló la idea de la historia compacta en estratos del tiempo, se trata de una historia compacta entre pasado-presente-futuro, contenida al mismo tiempo como las estratigrafías de la tierra. Lucy, a manera de esta teoría que tiene origen geológico, ha encontrado los estratos del tiempo compactos en un muro. Cada elemento de ese muro: piedra, ladrillo de bloque, cemento y alambre razor pertenece a un tiempo específico de nuestra historia reciente: preguerra-guerra-posguerra.
Cada capa de materiales es una capa de tiempo. Y a su vez, una capa de historia, una capa de la historia de las violencias.
El muro como horizonte, construido generaciones tras generaciones, ha sido elevado hasta el alambre de púas o las botellas de vidrio quebradas. Es un horizonte que pretende herir. Pero detrás o enredado entre esos materiales que hieren, se asoman o enredan flores.
A modo de una arqueología del presente, Lucy recolecta imágenes de piedras, ladrillos, concreto y alambre de púas. La arqueología del presente no es una paradoja, el presente debe ser documentado. Divididos tradicionalmente los planos de la Historia entre pasado y futuro, el presente nos parece efímero y fugaz, como las flores.
Lucy recolectó flores. Las flores elegidas por Lucy crecen en estaciones distintas, en suelos diversos, entre lluvia y sequía, fértiles por polinizadores naturales y en peligro de extinción o modeladas con capricho por manos humanas de jardinero. El cruce entre flor y tiempo es lo que Lucy ha logrado establecer en estas imágenes. Es un horizonte estético.
Los tintes con los que fueron transferidas estas fotografías conectan directamente con lo que no podemos ver. Con lo que está detrás de los muros. El jardín. Jardines antiguos, jardines nuevos. Jardines imaginados, jardines imaginarios. Jardines escondidos, jardines temidos. Jardines de miedo
Lucy atraviesa el muro y adivina jardines. Con su método de transferencia de la imagen mediante tintes obtenidos de pétalos de flores, la artista crea jardines.
Lucy recolectó flores directamente del piso, para no perturbar a los arbustos y los árboles. Para no intervenir. Las fotografías fueron impresas con tintes naturales obtenidos de
flores como la Allamanda, conocida como Flor de San José, flor amarilla y rosada; la veranera o buganvilia, la petunia, y la clitorea ternatea, conocida zapatilla de la reina o sencillamente como campanilla.
En el proceso de la elección y la recolección de las flores, hay experimentación. Hay flores con pétalos más carnosos que otros, hay flores que se oxidan rápidamente. Lucy respeta sus procesos propios y los de la naturaleza e identifica a las flores como sus especies compañeras.
Este trabajo de Lucy Tomasino conecta con Joan Didion cuando escribió Salvador, después de su viaje a El Salvador en 1982, y con Rebeca Solnit y su análisis sobre los jardines como respuesta al totalitarismo: “Si guerra tiene un antónimo, quizá sea jardines”, escribió Solnit en 2022. La historia salvadoreña es una historia de jardines que crecen en un proceso violento, geológico y humano.
Para esta exposición podríamos acotar (término también usado en la jardinería que, por su etimología, nos habla a la vez de dividir o crear refugios) a las palabras de Solnit: el antónimo de violencia puede ser precisamente jardín.