Para reencontrarse con los ancestros un grupo de 4 guatemaltecos forman Balam Ajpu para rescatar y reinterpretar los conocimientos antiguos calendáricos a través de sus canciones, aunadas con ritmos Mayas, andinos, caribeños, árabes y orientales, mientras a su vez experimentan con jazz, reggae, RAP, Hip Hop, R&B y cumbia, sin perder la esencia indígena.
Balam Ajpu, significa Jaguar Guerrero y representa la dualidad, los contrarios que se complementan, la energía masculina y femenina. Luego de iniciar en el 2010 la fusión del hip hop y abrir la Escuela Hip Hop Cosmovisión Casa Ajaw donde comparten sobre música con los niños, comienzan en el 2012 el proyecto de Los 20 Nawales con el cual buscan rescatar el conocimiento ancestral que desde la conquista fue enterrado en el olvido. “Nuestro propósito es rescatar, investigar y compartir el conocimiento para este nuevo tiempo porque es muy importante que volvamos a conectarnos con el tiempo natural, pues estamos en uno artificial. Nosotros respiramos aire, pero tu mente respira tiempo y estamos respirando un mal tiempo, ajeno a nosotros”, expresa René Dionisio, conocido como Tz’utu Kan.
Artistas guatemaltecos como Rebeca Lane, Paulo Aguilar, Tuco Cárdenas, Clara Cotuc Puzul y Sotz’il Jay completan este trabajo de recuperación de la sabiduría ancestral.
Es por eso que él, junto a los demás integrantes Yefrey Pacheco (M.C.H.E.) y Juan Martínez (Dr. Nativo), proponen usar el calendario Cholq’ij pues es el que está conectado con el cuerpo humano. “Tenemos 10 dedos en las manos y 10 en los pies, esos son los 20 Nawales (días) y tenemos 13 articulaciones mayores (rodillas hombros, etc.) Esas son las 13 energías, si lo multiplicas te da 260 y ese justamente es el periodo de los 9 meses en que se gesta el ser humano dentro de la madre, por eso está súper conectado con la naturaleza y con la vida”, agrega Tzutu, quien estudió arquitectura y también hace murales.
Los nombres de las veinte canciones son Ba’tz, Sak Bey, Aj, Ix, Tzikin y Ajmaq, Naoj, Tijax, Kawok y Ajpu, Imox, Iq, Ak’abal, Kat, Kan, Keme, Kej, Q’anil, Tooj y Tzi. Cada una incluye; coros del Dr. Nativo quien sintetiza el concepto y la inspiración del día a interpretar; liricas en castellano de M.C.H.E. quien investigó y redactó el significado, origen, elementos, animal y lugares energéticos de cada nawal con información de los guías espirituales Nan Suly de Xelajú, Ta Mariano de Quiché y Ta Pedro Cruz de Sololá; y la voz de Tz’utu Kan recitando el permiso, el perdón y la petición a la energía correspondiente en los idiomas Mayas Tz’utujil, Kakchikel y K’iché.
De ahí nace la intención de fusionar esos 3 idiomas para que las canciones tengan un significado genérico entre los 3 pueblos del lago de Atitlán. “Existía un Proto-Maya, la madre de las lenguas mayas, por eso hay muchas palabras que se parecen en todos los idiomas y queremos rescatarlas y usarlas para que todos los pueblos indígenas entiendan. Es un idioma que viene desde hace más de 10 mil años y eso es increíblemente poderoso”.
Los planes a futuro comprenden una gira de presentaciones más intensa y dos discos más, uno sobre las 13 energías y otro sobre los problemas sociales que asolan a Guatemala porque consideran necesario abordar el tema desde el tributo a las energías.
Para Tz’utu Kan en los idiomas hay mucho conocimiento y es importante rescatarlos. “Aprendí el idioma desde pequeño porque es el idioma materno, hay algunos que se han perdido, pero otros son muy fuertes y han resistido a pesar de la conquista, la globalización y el conflicto armado. Ha sido impenetrable en las montañas, especialmente por la mujer que ha conservado la medicina, la cultura, el traje, los idiomas. A la mujer le debemos la resistencia maya. La mujer es mucho más fuerte, más arraigada a la cultura. Miramos siempre afuera y no vemos hacia adentro. Cuando crecí me di cuenta que miramos siempre hacia afuera y no vemos hacia adentro, a mí también me pasó, quería aprender otros idiomas, pero comprendí que el nuestro es un potencial que no ha sido explorado. Por eso nos dimos a la tarea de estudiar, de volver a retomarlo”.
El esfuerzo y la pasión han rendido sus frutos, han tenido buena audiencia en los lugares donde se han presentado “la reacción es excelente aunque no entienden los idiomas, la gente canta y se conectan rápido, hemos viajado a Inglaterra, Colombia, México y en comunidades de Guatemala”. Ahora solo hace falta que hagan la presentación oficial del disco que será a finales del 2015, aunque el mensaje y la intención ya se está difundiendo rápidamente con artículos en el Washington Post, New York Times y TIME Magazine, “esto está creciendo y eso nos alegra, porque sabemos que en algo influirá positivamente”.
Escrito por Malva Izquierdo
Fotos cortesía de Balam Ajpu