Pocos instrumentos musicales son tan personales e intuitivos como la voz humana. No he conocido a alguien que no haya cantado alguna vez en su vida, aunque muchas veces por vergüenza, se cohíba al hacerlo en público.
Muchos cantan en sus cuartos con el cepillo de peinar como micrófono, otros en el carro a grito partido mientras esperan que la luz del semáforo se ponga en verde, muchos otros (o la gran mayoría) mientras toman un baño.
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En cualquier caso, debes saber que cantar trae beneficios para tu calidad de vida, tu sentido de bienestar tanto emocional como físico, ya que permite distenderse y requiere de la coordinación de muchas partes del cuerpo.
1. Segrega endorfinas
Tener una profunda pasión por el canto no es algo innato, es un efecto biológico a la que cualquier persona puede acceder.
Si una mamá canta a su bebé para que duerma, es porque la música en sí ayuda a la secreción de endorfinas.
Esta es una hormona que incita al placer y la felicidad, de la misma forma que comer, o tener sexo, el canto en personas de cualquier edad, funciona de la misma manera.
2. Tiene un efecto liberador
En lo personal como maestro de canto desde hace más de diez años, he sentido que he hecho una labor social más que musical en muchas personas, ya que en la inmensa mayoría de casos, los estudiantes salen más felices de lo que entran.
Esto es debido al efecto que tiene el canto en cada una de las personas. Cuando uno canta se despoja de complejos, inseguridades y cualquier otra cantidad de cosas que uno va cargando desde niño.
Desnuda su personalidad y se expone frente a un profesor y a uno mismo. Es un efecto que te libera de la misma forma de gritar con todas tus fuerzas frente al vacío, solo que en este caso lo hacés con notas musicales.
3. Mejora tu postura
Para cantar correctamente tenés que tener una buena postura, ya que sino tu voz no tendrá la misma fuerza, y tu capacidad de respiración disminuye notablemente.
Al practicar regularmente, esto genere memoria muscular y te ayuda a percatarte que es más beneficioso para tu cuerpo tener una postura saludable, que dejar caer el peso de tu cuello y cabeza sobre tu espalda.
4. Te da más seguridad en vos mismo
Cantar puede ser aterrador. Al cantante es al músico que más el público pone atención, ya que todo el mundo alguna vez ha cantado en su vida, y es algo con lo que las personas se identifican fácilmente.
Si no tenés la suficiente seguridad y desinhibición, difícilmente el público se identificará con tu interpretación.
Todos alguna vez hemos notado a un cantante inseguro en el escenario, es bastante evidente y llegamos a sufrir con él (o ella), ya que no desearíamos estar en sus zapatos.
Mientras más cantemos, tendremos más seguridad en nosotros y llegaremos más a disfrutar donde cantemos, ya sea frente a una fogata, en un karaoke, en estudios de grabación o frente a un público que llegó a escucharme cantar.
5. Cantar es un ejercicio aeróbico
Cantar es soplar. Todo se basa en el aire y en su correcto manejo. En cierta forma es muy similar a la meditación y al yoga, ya que uno tiene que tomar muy en cuenta su capacidad de respiración y su capacidad pulmonar aparte de sincronizar una variedad de músculos que intervienen en el ejercicio del canto.
No existen muchas diferencias, ya que te permitirá hacer respiraciones más grandes y más lentas. Por eso cantar es un ejercicio aeróbico.
Por lo tanto, te brinda un aumento en la oxigenación de la sangre; ejercitas los pulmones, estimulas tu sistema circulatorio, obligas a tus músculos a trabajar más, incluso si cantas sentado.
En el proceso, tu ritmo cardiaco comienza a disminuir. Todo esto ayudará a mejorar la variabilidad de la frecuencia cardiaca.
6. Reduce el estrés
Los seres humanos somos como aves, cantamos desde que somos niños en diferentes circunstancias de nuestras vidas.
El canto puede ayudarnos a conseguir: una frecuencia cardíaca más baja, disminución de la presión arterial y por ende reducción del estrés.
El canto se utiliza para ayudar a pacientes que sufren de una variedad de circunstancias psicológicas como depresión y ansiedad.
7. Excelente forma de entrenar el oído
Si sos aspirante a músico o músico profesional y no podés afinar una nota, estás muy lejos de profesionalizarte o al menos ser un músico decente.
No hay mejor forma de entrenar tu oído que cantar escalas, acordes, arpegios, frases melódicas, armonías e incluso patrones rítimicos; y en su totalidad canciones enteneras.
Así una vez que queramos aplicarlo en nuestros instrumentos, cualquiera que estos sean, el proceso será más orgánico e intuitivo y habrá una conexión cerebral mucho más efectiva dado a que las notas musicales estarán ya en nuestra cabeza. Es sin lugar a duda la mejor forma de entrenar el oído.
8. Mejora tu concentración
Si sos de los que se distraen fácilmente, tal vez estudiar canto es para vos. Cuando cantamos estamos absortos en la melodía, no podemos distraernos porque si no el proceso tanto letrístico como musical queda a un lado, se nos olvida la letra, la melodía y la música no fluye. Para cantar correctamente hay que estar bien concentrados.
9. Ayuda a crear vínculos
Si vivimos en una sociedad lo ideal es conectarnos con el mundo que nos rodea, por eso si cantamos en un coro, una banda o como solistas siempre tendremos cierta complicidad con nuestros compañeros.
O simplemente si vamos a algún karaoke con amigos, sentiremos un sentimiento de compañerismo y amistad más sólido.
10. Es una de las cosas más lindas de la vida
La música en general es una de las cosas más hermosas que el hombre ha descifrado a lo largo de su historia, y poder hacerlo con nuestra propia voz nos da un acceso casi inmediato a ella.
Si sos cantante sentite dichoso de dedicarte a una disciplina artística llena de belleza y satisfacción, y si lo hacés por hobby sentite privilegiado de poder acceder a uno de los artes más expresivos que la humanidad haya descubierto desde que bailábamos en las cavernas.
Por eso y muchas cosas más completemos nuestros días cantando diario. No importa la edad, si sos niño, joven, adulto o anciano, el canto tiene algo que ofrecerte en cada caso.
Donaldo Sevilla, conocido por su columna como El Melómano, es fundador del Centro de Estudios Musicales, para más información de los cursos que ofrecen seguilos en sus redes sociales.
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