Es hoy y todavía Fabio recuerda la satisfacción de sentarse a dibujar en una mesa con sus cuatro hermanos. Y aunque en su opinión él era el que peor dibujaba, no hay duda que ahí comenzó todo. Conocé más sobre él a continuación.
Cuando llegó el momento de entrar a la universidad tenía la certeza de no encontrar algo que le apasionara. Su opción era la carrera de arquitectura, pero tampoco quería ver muchas matemáticas . Entonces se enteró que en la Upoli estaba Diseño Gráfico y para él fue «un gran descubrimiento ver que podía hacer una vida profesional a través de la creatividad y el dibujo».
Conforme el tiempo pasaba se daba cuenta que fue la mejor decisión que tomó, pues se sentía cómodo y motivado. «En ese tiempo era el único lugar donde estaba la carrera, éramos pocos y teníamos buenos profesores de Cuba. El ambiente era genial y yo lo veía como un hobby divertido, no pensaba ‘ahh tengo que ir a clases’. Simplemente lo disfrutaba mucho», expresa.
Una vez graduado trabajó en un sinnúmero de agencias de publicidad y se le presentó la oportunidad de hacer una pasantía en Holanda a través de Ogilvy, en donde trabajaba. Luego estuvo en Uruguay ganando más experiencia y actualmente lleva 2 años trabajando como freelance en Nicaragua y le ha ido muy bien.
Desde la etapa en que dibujaba con grafito, hasta el graffiti de Heisenberg de Breaking Bad, Fabio ha logrado balancear lo que le gusta y lo que hace para trabajar. Y es que para Fabio el diseño y la ilustración aplicada al diseño le han servido para desarrollarse como profesional. Sin embargo, lo que a él le entusiasma mucho es la intención de crear cosas nuevas no solo en los negocios, sino también en el arte.
De hecho sus proyectos personales se inclinan por una perspectiva artística que a su vez viene cargada de cierta rebeldía y creatividad curiosa que logran impactar con mensajes ilustrativos. Es el caso de Uncover the Truth, trabajo visual publicado en septiembre del 2015, y en donde Fabio ilustra el logo de Coca Cola con los órganos del cuerpo humano dañados al consumir dicha bebida. Su propuesta se volvió viral en poco tiempo y esto le trajo ofertas de trabajo dentro y fuera del país, así como reconocimiento en revistas internacionales. «Lo hice como algo aparte, me llama la atención o me preocupa que las empresas no tengan esa conciencia de prevenir sobre sus productos, y quise hacerlo como proyecto aparte», comenta y luego sonríe al recordar que algunos artículos habían inventado una historia exagerada en donde él decidió hacerlo, porque casi se muere de una adicción severa a la Coca Cola.
Hace dos meses lanzó un trabajo similar con el logo de Mcdonalds, llamado McIssues with McFries, y piensa hacer otros próximamente. No obstante, los planes no se quedan solo en ese aspecto. También piensa lanzar una marca de ropa rebelde con diseños que ya ha hecho y otros que tiene en mente, un poco más contra la corriente. «Me veo con un negocio propio, un restaurante, porque me gusta la comida y la cocina, también quisiera fundar una empresa de branding, porque es lo que más me gusta hacer. Me gustaría hacer un par de exposiciones de arte con mis trabajos personales. También me gusta la actuación, he salido en un par de comerciales, pero quisiera hacer algo más artístico», expresa.
La creatividad según Fabio
Esa temida palabra que define una propuesta o idea es el talón de Aquiles para muchos, pero Fabio considera que todo deviene dentro de un proceso inexorable. «Para mí, lo primero es no apresurarse con la parte investigativa, antes de empezar a diseñar hay que recopilar la información para tener la materia prima en tu cerebro. Entre más estés informado de todos los detalles del proyecto tendrás mejores resultados. Yo a veces hasta investigo la historia de la empresa, incluso veo los gustos del cliente. Lo segundo es darle tiempo al tiempo, los que trabajamos en esto somos famosos por procrastinar bastante, pero creo que es una parte necesaria, pues tenés la información a nivel inconsciente. La mente está como trabajando siempre, marinando toda esos detalles a fuego lento y hay un momento en que sale a la luz. Tercero, hay que sacar esas ideas sin filtro, tirar todas esas ideas que se te vienen a la mente sin analizarlo mucho, hacelo y luego editalo porque si te autobloqueas es más lento el proceso», afirma.
Tal vez por eso es que aun sigue enamorado de lo que hace, sobre todo porque sabe muy bien que «la creatividad es la innovación de viejos elementos, es el resultado de unir y mezclar, no inventás el agua helada, pero fusionás sensaciones entre dos cosas que tal vez no tienen mucho que ver y aun así hacen surgir una nueva idea».
Fabio es un personaje único, con una mente sin igual. Pronto todos sabremos mas de él. 😉