Si vas caminando por la calle y te tropezás con una montañita de libros sobre un petate, ese es el LibroTrueque. Y más te vale andar preparada/o porque no todos los días tenés la oportunidad de cambiar tus libros por otros que no has leído. Uno nunca sabe qué puede encontrarse en el petate de este original proyecto que surgió de una lluvia de ideas.
¡Vengan, vengan! ¡Cambien sus libros! ¡Llegó el LibroTrueque! ¡Tenemos libros muy variados para todas las edades! ¡Deshágase de esos libros viejos que le trajeron alegrías o tristezas! ¡Comparta el conocimiento intercambiando un libro! ¡No se guarde esas páginas! ¡Que no se le empolven los mataburros! ¡Pase adelante!
Gran parte del proyecto gira en torno al grupo en Facebook, un espacio en línea para el intercambio de libros digitales. La meta es crear una comunidad de lectores que compartan sus bibliotecas virtuales y sus propias creaciones. Ya son quinientos miembros con los que se puede interactuar.
Este proyecto no quiere quedarse solamente en el círculo universitario, aspira a crecer y llegar a los barrios, a los semáforos y a todos los lugares donde haya un pequeño espacio para el petate. En el barCultura Quilombo hay un LibroTrueque permanente y dos LibroTrueques itinerantes, que no son más que dos saquitos dispuestos a recorrer el territorio nacional de ser posible.
A pesar de que el trueque está explícito en su nombre, aún hay muchas personas que se acercan preguntando el precio de los libros. Promover una cultura cambiaria como la que nuestros antepasados tenían ha sido todo un reto; no es fácil la política del uno a uno, del taco a taco, un libro por un libro.
Esta iniciativa tiene ganas de seguir creciendo, está abierta a que se unan más personas y a recibir nuevas ideas, aspira a ser la pauta para que grandes cosas ocurran, cosas que solo se han visto en la literatura que promueven. El LibroTrueque no necesita más que un petate, un par de saquitos y personas que lo hagan crecer más y más.
Podés acceder a LibroTrueque en facebook.