La perseverancia es siempre la cualidad con la que se describe el rock nica. Las bandas que llevan años de trayectoria usaron como adjetivo esta palabra para seguir la senda de la música dentro de un género que por naturaleza apasiona y desenfrena. Ese es justamente el caso de Raza Oculta, una banda que nació en el 2003 en pleno apogeo de guitarras y voces rockeras en el país.
Ahora, 12 años después, los autores de No Hay Lógica se encuentran frente a una nueva etapa: Lanzar su segundo disco llamado El Lado Suave de la Ira. “Hace un par de años lanzamos el primer sencillo (A Quemar Llantas), luego fue Con Todos Menos Conmigo. Ahora estamos por promover el penúltimo sencillo que la escribí para mi hija, la rola se llama Sos Parte de Mí, se trata de la realidad de muchos padres que van a otros países y dejan a sus hijos para poder trabajar y así ofrecerles algo mejor. Por último a mediados de este año lanzaremos la rola La Memoria. Probablemente el disco sea presentado oficialmente después de haber lanzado todos los sencillos”, expresa Carlos Alexis Mejía, vocalista y fundador de la banda.
La idea también es empezar a trabajar cuanto antes en un tercer álbum que se va a llamar Cabanga, son 8 canciones, 7 originales y un cover en versión rock de Procuro Olvidarte que se hizo para Hernaldo Zúniga.
Raza oculta para Alexis significa la raza humana que no vemos a simple vista y que esconde los anhelos y características de la humanidad en sí. Actualmente la banda está conformada por Handel Downs en el bajo, en la batería Johnny Metralla y Carlos Alexis Mejía guitarrista y vocalista. Cabe destacar que en un futuro piensan incluir a un miembro más, pero es una sorpresa.
Las canciones como No hay Lógica y Mírame aun se escuchan en la actualidad y se han convertido temas representativos de la banda. “A mi me gusta mucho ver cómo la gente disfruta de cantar estas canciones que ya están roquitas, pero siguen siendo parte del repertorio. Estas dos rolas son del primer disco llamado igual que la banda y grabado en el 2003 en San Francisco, para mí es un disco guerrillero, revoltoso. La gente lo siente y canta los temas, eso me gusta mucho. En el punto de vista de producción era bien pobre, pero hay bastante alma, teníamos bastante hambre de podernos expresar. Cuando escuchás el disco completo sentís la energía de chavalos sacando sus puntos de vista y sus frustraciones”, nos cuenta Carlos Alexis.
En cambio, El Lado Suave de la Ira tiene más calidad y madurez en composición, pues se invirtió bastante en la producción y fue grabado en un estudio en Finlandia. Sin embargo, para Alexis este disco no es tan hambriento como el anterior, “el otro tiene más garra, por eso le pusimos ‘el lado suave…’ porque no hay canciones con mucha batalla, mucho ataque”.
Los conciertos vienen pronto a mediados de este año, los integrantes están entusiasmados con la idea pues siempre tocar en vivo ha traído momentos inolvidables. “El recuerdo más importante que tuvimos fue cuando la banda volvió a subirse a un escenario tras larga pausa. Nos invitaron a formar parte de las bandas que abrieron el concierto de Molotov, cuando subimos y tocamos Mírame todo el mundo se puso a cantarla. Es una canción que a mi me dolió escribir, que la sufrí (risas) y oir cómo tantas personas todavía se acordaban de esta rola, cómo 12 mil personas se sabían la letra fue increíble, porque cuando sos músico y dejás esa etapa atrás pensás que la gente no se acuerda y esa experiencia me cambió la vida”, afirma.
A su vez, Carlos Alexis cree que para poder seguir con el sueño de una banda, la humildad es lo más importante, “no hay que creernos celebridades, pensar que sos una fiera o sos famoso es lo de menos. Es necesario que entre nosotros apoyemos esto, no hay porqué serrucharnos el piso entre bandas, hay espacio para todos y qué bueno que existen los seguidores del rock nica, para que esto no muera”, puntualiza.
Escrito por Malva Izquierdo
Fotos cortesía de Raza Oculta y Jorge Mejía Peralta